A pesar de la alta resistencia que comúnmente tiene el sistema inmunitario, existen momentos en los que este no reacciona igual, por lo tanto el organismo puede estar más desprotegido y vulnerable frente a microorganismos o partículas que pueden enfermar.
Es por esta razón que es importantísimo saber detectar cuándo nuestro sistema inmune no está funcionando bien, pues muchas veces este puede estar debilitado sin que nos demos cuenta, a pesar de que existen señales claras a las cuales muchas veces no le prestamos atención.
¿Por qué se debilita?
Son muchas las razones por las que el sistema inmunológico puede estar débil, una de ellas es una inmunodeficiencia congénita, aunque estas son pocas comunes.
También existen enfermedades o virus que pueden afectarlos, como por ejemplo el VIH, el cual debilita el sistema inmune de forma permanente, aunque la causa más común de un sistema inmune débil es el estilo de vida que lleva la persona, en donde factores como el estrés, un mal descanso, la carencia de nutrientes y el sedentarismo juegan un papel importante.
Por otro lado no podemos obviar el desgaste natural del cuerpo producto del pasar de los años, pues mientras más edad se tenga menos producción de anticuerpos ni de células inmunes genera el organismo.
Las mujeres durante el embarazo también suelen experimentar un debilitamiento del sistema inmune, esto provocado por distintos cambios hormonales y físicos que se generan en la gestación.
¿Cómo saber si el sistema inmunitario está debilitado?
Al igual que sus causas, los síntomas de un sistema inmune débil son variados, aunque existen unos que son bastantes comunes, como por ejemplo el agotamiento, aunque también es señal de una debilidad en las defensas el hecho de experimentar infecciones de distintos tipos de forma regular.
Quienes padecen resfriados de forma regular también pueden estar experimentando una disminución de las defensas del cuerpo, así que es importante estar atentos a los síntomas comunes de las infecciones respiratorias, como lo es la tos, la fiebre, los dolores de garganta y la rinitis.
También puede indicarnos una falta de fortalecer en el sistema inmune el hecho de padecer herpes, o gingivitis, así como el hecho de que las cicatrices tardan en sanar, tener problemas de contracción, reacciones alérgicas o irritaciones de la piel.
Adicionalmente existen otras preguntas que pueden indicarnos el estado de nuestro sistema inmunitario, una de ellas es saber si estamos en el peso ideal, pues un peso por debajo o peor encima de lo normal puede afectar al sistema inmune.
También los hábitos dañinos como fumar, consumir alcohol, tomar mucho café, el consumo de drogas, el sedentarismo o el no contar con las vacunas habituales puede ser un indicativo de que nuestro sistema inmunológico no debe estar funcionando de la manera más correcta.
¿Qué hacer?
En caso de sentir que algo anda mal con nuestro sistema inmunitario o con la salud en general lo mejor es acudir al médico.
Aunque para fortalecer el sistema inmune lo primero que debemos hacer es llevar un estilo de vida saludable.
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