El ministro de Obras y Servicios Públicos, Claudio Polich mantuvo este martes una extensa reunión con el intendente capitalino, Eduardo Tassano, a fin de articular tareas de control y supervisión de lo que será la obra de saneamiento más grande de la provincia, cuando se construya la planta de tratamiento de efluentes de Líquidos Cloacales de la ciudad de Corrientes. La misma beneficiará a más de 400 mil vecinos con este esencial servicio.
De este encuentro, realizado en el salón de Situación del MOSP, también tomaron parte el interventor del Ente Regulador del Agua, Leopoldo Martínez; los secretarios municipales de Infraestructura, Mathias Alejandro Cabrera y de Desarrollo Urbano, Alejandra Wichmann, y el subsecretario de Fiscalización Urbana, Mario Estigarribia.
En ocasión y atentos a que este proyecto contempla además de la mencionada planta, dos estaciones de bombeo: Estación Cementerio y Estación Napindá se evaluó las correspondientes trazas que conectan a dichas estaciones de bombeo con la ya mencionada planta ubicada en un predio de Santa Catalina.
La obra, que significa 2.600 millones de pesos de inversión y un tiempo estimado de ejecución de 2 años, atraviesa gran parte de la zona sur de la ciudad, motivo por el cual será de vital importancia la participación conjunta de los distintos estamentos del Estado para que el avance de los trabajos no se vea interrumpido y a su vez garantizar a todos los vecinos de la ciudad que puedan circular por las zonas intervenidas con la mayor normalidad posible. Al respecto el ministro Polich, adelantó que el contralor por parte de la Provincia de las alternativas de esta mega obra, lo llevarán el ministerio a su cargo y el Ente Regulador del Agua, con la colaboración de Aguas de Corrientes, en el interés de preservar la infraestructura existente, dado que los trabajos incluyen la rotura de calles por el entubado previsto.
