
Los argentinos volverán a las urnas para elegir diputados nacionales y, en algunas provincias, senadores.
Como en cada elección, las autoridades de mesa —presidentes, suplentes y auxiliares— tendrán la responsabilidad de garantizar el correcto desarrollo de la votación.
Son quienes abren y cierran la mesa, controlan el padrón, supervisan el conteo de votos y aseguran que cada ciudadano pueda ejercer su derecho en condiciones de transparencia.
A cambio de esa tarea, que suele extenderse desde las 7 de la mañana hasta pasadas las 21, el Estado otorgará una compensación económica.
Según lo dispuesto por la Junta Electoral Nacional, los presidentes de mesa recibirán $40.000 por toda la jornada.
A ese monto se le sumará un extra de $40.000 si el titular o suplente realiza la capacitación previa obligatoria, dictada antes de los comicios. En total, quienes cumplan ambas instancias podrán percibir hasta $80.000.
El pago se efectúa generalmente dentro de los 60 días posteriores a la elección, a través de depósito bancario o del Correo Argentino, según la opción elegida al momento del registro.










