
El Decreto 149/2025, publicado este miércoles en el Boletín Oficial y firmado por el presidente Javier Milei y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, afecta a los empleadores de todos los sectores que no estén afiliados a una cámara empresaria, y que ya no deberán hacer un aporte obligatorio a la misma.
Esta norma beneficia especialmente a los comercios e industrias pymes, las que se verán relevadas de un costo laboral que puede ir de 0,5% a 1% del salario de sus empleados.
Antes de este cambio en la interpretación de la regulación vigente, las cámaras empresariales aplicaban una «interpretación exagerada» de la ley sobre que regula los Convenios Colectivos de Trabajo (CCT), para establecer el cobro de aportes o contribuciones obligatorias a las compañías de la actividad, estén o no asociadas a esas entidades.
Sobre esa base de interpretación legal, existen acuerdos colectivos de trabajo que estipulan contribuciones obligatorias a favor de cámaras empresariales signatarias de dichos acuerdos, a cargo de empleadores no asociados o afiliados a esas entidades.
El Decreto niega que estas cláusulas convencionales no tienen fundamento normativo, por lo que no puede imponerse el cobro de contribuciones obligatorias en favor de las cámaras o grupo de empleadores a las compañías no asociadas ni agrupadas en ellas.
Además, el Gobierno advirtió que no homologará paritarias en las que se obligue a las compañías a realizar estos aportes o contribuciones, dado que considera que hasta ahora se interpretaba de manera forzada la ley que regula los convenios colectivos.