
El G20 se raliza eb Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro, donde se celebrará la cumbre de este lunes y martes.
Los líderes del G20 abren este lunes una cumbre en Rio de Janeiro bajo presión para lograr un acuerdo en la COP29. En la COP29, los líderes de gobiernos, empresas y la sociedad civil se reunirán para encontrar soluciones a la crisis climática.
Los dirigentes de las principales economías, que representan el 85% del PIB mundial y el 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero, buscarán avanzar en particular en el financiamiento de la lucha contra el cambio climático.
El objetivo es dilucidar cómo financiar un billón de dólares anuales de ayuda climática para los países en desarrollo, para permitir construir centrales solares, invertir en irrigación o proteger ciudades contra las inundaciones.
La Unión Europea es el primer contribuidor mundial, pero en periodos de austeridad se muestra reacia a aumentar sus presupuestos internacionales.
El presidente argentino, Javier Milei revisará cada uno de los párrafos del último borrador del comunicado final del G20 de Brasil antes de firmar al pie de página.
Si el texto diplomático violenta su perspectiva personal e ideológica sobre la agenda del desarrollo sustentable, el cambio climático, la guerra en Ucrania y la crisis en Medio Oriente, no firmará el comunicado del G20 y habrá una crisis inesperada en el foro multilateral.
Milei no tiene intenciones de fracturar el G20 para deteriorar su papel institucional en el escenario global, como sugieren desde hace días caracterizados voceros del gobierno de Lula da Silva.
Al contrario, el presidente argentino considera que el G20 cumple un papel en el tablero internacional, pero exige que Brasil no use la agenda del G20 para fortalecer su política doméstica en detrimento de los intereses permanentes de todos los socios de la cumbre multilateral.