El 31 de octubre se celebra el Día Mundial de las Ciudades, una fecha proclamada por la Asamblea General de la ONU en 2014.
En 2014, ONU Hábitat lanzó una iniciativa llamada Octubre Urbano, para poner de relieve los desafíos urbanos mundiales e involucrar a la comunidad internacional en el desarrollo de la Nueva Agenda Urbana, aprobada en octubre de 2016 en la ciudad de Quito durante la Conferencia de Hábitat III.
Esta Nueva Agenda Urbana es una extensión del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 11 que pretende conseguir que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros y sostenibles.
Más de la mitad de la población mundial (un 54%, o 4.000 millones de personas) vive en ciudades. En los últimos decenios la humanidad ha experimentado un crecimiento urbano considerable. Para el año 2030 se estima que unos 5.000 millones de personas vivan en ciudades.
La vida en las ciudades supone una oportunidad de desarrollo para las personas, son un hervidero de ideas, centro de comercio, cultura, ciencia y comunicación, pero también plantean problemas de desarrollo sostenible, contaminación, infraestructuras y recursos.
El Día Mundial de las Ciudades se promovió con el objetivo de promover el desarrollo sostenible de las mismas y fomentar la cooperación entre países para planificar la urbanización.
Ello maximiza la capacidad de las ciudades para generar empleo y riqueza, y para fomentar la diversidad y la cohesión social entre diferentes clases, culturas, etnias y religiones.
Las ciudades deben ser diseñadas para vivir juntos, crear oportunidades, permitir la conexión e interacción, y facilitar la utilización sostenible de los recursos compartidos.