El Concejo Deliberante declaró al sector ubicado en la zona sur de la ciudad como “Monumento Natural”. El Comité Ejecutivo de la Reserva, presidido por el secretario de Coordinación de Gobierno, Hugo Calvano, celebró la sanción de la ordenanza, dando cuenta que se trabaja para dotar al lugar de las condiciones necesarias para que pueda ser visitado y aprovechado por todos los vecinos.
El Concejo Deliberante capitalino sancionó recientemente la Ordenanza N°7328 que declara a la Reserva Santa Catalina como “Monumento Natural” de la ciudad, en su extensión de 275 hectáreas. La decisión fue celebrada por el secretario de Coordinación de Gobierno, Hugo Calvano, quien señaló que “lo que hace este tipo de hechos es plasmar la voluntad institucional del municipio de que éste es el camino a tomar para preservar, recuperar y regenerar nuestra naturaleza”.
El funcionario preside además el Comité Ejecutivo de la Reserva Santa Catalina, explicando que la misma “surge posteriormente a la creación del Sistema Municipal de Áreas Protegidas, que fue sancionada por ordenanza en diciembre de 2021, y que estableció un Consejo en el que está involucrado el municipio a través de distintas áreas de Gobierno”.
“Está también la Universidad Nacional del Nordeste, a través de distintas facultades, organizaciones científicas y de la sociedad civil, todos buscando trabajar en políticas públicas ambientales de preservación, restauración, mitigación y adaptación al cambio climático que es lo que hoy nos atraviesa a todos”, agregó.
Calvano indicó que “dentro de este sistema, se creó la primer área protegida de la ciudad, que es la Reserva Natural Santa Catalina, la cual a través del Comité Ejecutivo integrado por distintas áreas de Gobierno, va trazando una hoja de ruta para ir fortaleciendo la misma y avanzando para dotarla de las condiciones necesarias para que pueda ser aprovechada al ciento por ciento, no solo por las instituciones científicas que hacen estudios y trabajan, sino para que el vecino se lo pueda apropiar a través del uso”.
El titular del Comité Ejecutivo de la Reserva Natural manifestó que “también pretendemos que lo pueda aprovechar el sistema educativo, a través del aprendizaje en este tipo de entornos, que tiene la ventaja de ser una reserva natural emplazada en una zona urbana, lo cual le da una característica diferente a otras que hay en el mundo, y que también tiene como ventaja trabajar con un gran pulmón verde que absorbe el dióxido de carbono que generamos en la actividad urbana permanentemente”.
“A la vez, desde el Comité venimos llevando adelante las distintas metas que nos trazamos. Continuamos con las obras de cerramiento del lugar, dotando de infraestructura de servicios, tanto eléctrica como de agua, para que el cuerpo de guardaparque y los operarios que prestan servicios en este lugar tengan las condiciones adecuadas de trabajo”, indicó el funcionario.
Calvano señaló que “la idea es que este año podamos ya tener la infraestructura básica para poder contar con sanitarios y un salón de usos múltiples que permita llevar las actividades más periódicamente y poder de esa manera seguir generando la apropiación ciudadana”, más allá que actualmente se trabaja con visitas programadas puntuales a la Reserva para poder garantizar la asistencia requerida.
“Lo fundamental es entender que esta Reserva Natural es patrimonio de todos y por eso estamos trabajando para que el vecino pueda ir en condiciones adecuadas y de preservación. Entendemos que es la única manera que esto perdure y se perpetúe en el tiempo como un espacio verde y de calidad, cumpliendo la función ambiental, porque es parte central del Plan de Acción Climática de la Ciudad, pero a la vez cuidando todo esto para las generaciones futuras”, concluyó.